renovación de la consagración al Sagrado Corazón de Jesús.
- Acuña Antúnez
- 15 jun
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El 12 de junio, Uruguay vivió un momento de profunda conexión espiritual: la renovación de su consagración al Sagrado Corazón de Jesús, exactamente ciento cincuenta años después de que el beato Jacinto Vera hiciera esa misma entrega en nombre de todo el pueblo.
La celebración tuvo lugar en el Santuario Nacional del Sagrado Corazón, en el Cerrito de la Victoria.
La misa fue presidida por el cardenal Daniel Sturla, arzobispo de Montevideo, quien, al dirigirse a la asamblea, destacó que esta renovación es mucho más que una tradición. “Jesús desea ardientemente encontrarse con nosotros, como expresó en la última cena. Ese mismo anhelo lo sentimos hoy, aquí, como pueblo que vuelve a decirle: ‘aquí estamos, Señor, confiamos en tu Corazón’”.Este acto no fue un simple recuerdo histórico. Fue una respuesta actual, una reafirmación de que seguimos confiando en ese Corazón que no deja de latir por nosotros. Porque en cada consagración, también se renueva nuestra esperanza.
Oremos juntos la oración, confiando en que el Corazón de Jesús nos abraza con su amor perfecto. Que cada palabra sea una entrega sincera, personal y también comunitaria, como signo de fe y esperanza.
Oración de consagración al Sagrado Corazón de Jesús
“Corazón de Jesús:
Tú eres nuestro consuelo y nuestra esperanza.
Humildemente postrados en tu presencia,
te pedimos perdón de nuestros pecados.
Proclamamos que queremos vivir y morir en tu servicio
y corresponder dignamente a tus soberanos designios de misericordia
en favor de la Iglesia y de la sociedad.
Te consagramos nuestras personas y nuestras familias,
nuestros intereses y nuestros bienes,
el presente y el porvenir.
Te rogamos, Señor, acojas benignamente nuestras plegarias
por tu santa Iglesia,
por la conversión y salvación de los hombres,
por la paz y prosperidad de nuestra patria y de todos los pueblos.
Amén.
¡Corazón Santísimo, sálvanos!¡Corazón de Jesús, ten piedad de nosotros!”
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